*Una propuesta de Lina Ravines Compañía Flamenca
*Se presentará en el Teatro de la Danza Guillermina Bravo del jueves 5 al domingo 8 de marzo
La problemática social actual ha permitido que las mujeres puedan vivir de maneras diferentes según se los dicte su momento social, emocional e ideológico. Ya no aceptan vivir sometidas bajo un estereotipo y mandato social.
Tales son las reflexiones personales que motivaron a la bailarina y coreógrafa Lina Ravines a crear el espectáculo Mujeres de colores, que se presentará en el Teatro de la Danza Guillermina Bravo del Centro Cultural del Bosque el jueves 5 y viernes 6 de marzo, a las 20:00 horas; sábado 7, 19:00 y domingo 8, 18:00 horas.
Será a través de su grupo Lina Ravines Compañía Flamenca y música en vivo que la creadora compartirá sus inquietudes en torno a la equidad e igualdad de género a través de este montaje que busca mostrar que las divisiones entre géneros debilitan a la humanidad, dijo.
La maestra Ravines explica que la propuesta Mujeres de colores fue detonada dentro de una jornada de danza española ocurrida en 2017; en ese año contaron con la presencia de la investigadora Beatriz Martínez procedente de la Universidad de Oviedo, quien impartió la charla “La danza en España durante el franquismo” y durante un taller que ofreció en el Cenidi Danza mencionó un texto del escritor Jardiel Ponciela llamado “Mujeres verdes, rojas, lilas y grises”, donde se hace una sátira hacia las mujeres azules, color que el franquismo les dio a todas aquellas que tuvieron empatía con esta ideología.
“Debido a que mi formación alterna es la Psicología clínica con enfoque de género, dicho escrito me inspiró profundamente para crear “Mujeres de colores” ya que la problemática social actual ha permitido que las mujeres podamos vivirnos de mil maneras diferentes según nuestro momento social, emocional e ideológico nos dicte y ya no aceptamos vivir sometidas bajo un estereotipo y mandato social”.
Quien posee más de 24 años de trayectoria artística, describe lo que el espectador observará en escena: diversas mujeres bañadas de una iluminación que resalta los colores y la individualidad de cada una. El cuadro de baile contará con un diseño plástico que se caracteriza por vestir solo con la iluminación, resaltando los colores rojo, verde, púrpura, azul y ámbar. Algunos hombres representarán al Franquismo, ideología e imposición sobre la mujer y su individualidad. Al final, todos los personajes demostrarán que las divisiones entre con géneros nos debilita y la unión hace la fuerza de la equidad e igualdad.
Al preguntarle a la maestra Ravines cuáles son las reflexiones que quiere compartir con el público, esto responde: “Es importante que pensemos que tanto hombres como mujeres podemos adoptar las características que normalmente se le asignan al otro sexo para formar nuestra propia feminidad o masculinidad sin someternos a ninguna expectativa familiar o social. Tenemos que contribuir a generar conciencia y sensibilización en la equidad e igualdad de género. El mensaje es muy claro: las mujeres somos diferentes y diversas entre nosotras”.
La también docente en Educación estética y artística en la UNAM está satisfecha con los resultados de Mujeres de colores, ya que es un reflejo fiel del estilo de su compañía, donde la propuesta dancística va perfectamente sincronizada con la propuesta musical, ya que la música es creada específicamente y el montaje se va construyendo al mismo tiempo, dando como resultado una propuesta única e irrepetible. Así mismo, el uso de los elementos dancísticos es innovador al no ser usados como regularmente se manejan, si no que un manejo experimental permite una experiencia visual distinta a lo antes visto.
Finalmente, la fundadora y directora de Lina Ravines Compañía flamenca asegura que con esta obra reafirma sus contenidos de temática psico-emocional, de identidad, igualdad y equidad de género, salud mental y emocional y originalidad musical.